Como recuerdo permanente del pasado, de siglos de historia a sus espaldas, de foco devocional de los vallisoletanos/as, la imagen de Nuestra Señora de la Peña de Francia atiende desde su camarín en el retablo mayor de la Iglesia Parroquial de San Martín y San Benito El Viejo y ve pasar la vida de la ciudad, tan cambiada desde que su efigie fuera hallada en tiempos remotos en el Prado de la Magdalena.
No es la primera vez que se trata en este blog sobre la Virgen de la Peña de Francia (enlace), una de las más antiguas devociones marianas de la ciudad, lo cual la constituye en un auténtico tesoro devocional para Valladolid, tal vez no lo suficientemente valorada en la actualidad –puede que debido a su desconocimiento-. Pero es importante volver a recordarla, especialmente en este mes de octubre, en el que en otros tiempos la imagen protagonizaba su salida procesional.
Antes de ello, conviene recordar que, como informa Casimiro González García Valladolid, al tratar sobre esta imagen, Nuestra Señora de la Peña de Francia contaba con dos momentos en los que se celebraba cultos solemnes en su honor, en el mes de agosto y en el mes de octubre.
“Tiénese á tan sagrada imágen mucha devoción y se la tributan piadosos cultos, celebrándose su festivídad la tercera dominica del mes de Agosto, día de San Joaquin, padre de Nuestra Señora.
Celosa su Venerable Cofradía en honrar más y más á la Santísima Virgen, su celestial y bondadosa Patrona, fundó en Junta general de 25 de Julio de 1893, una solemne Novena anual en su obsequio, que termina el último domingo del mes de Octubre; y en Junta general de 27 de Mayo de 1895, acordó que la venerable Imágen de Nuestra Señora de la Peña de Francia, salga en la solemne procesión del Corpus, como así viene haciéndolo desde dicho año”. (Recuerdos y Grandezas, Tomo I, pág. 328)
Además, como se acaba de ver, la imagen también participaba en la Procesión del Corpus Christi (desde 1895 a 1925) y, de forma extraordinaria, el 30 de octubre de 1904, Año Jubilar con motivo del L Aniversario de la Definición del Dogma de la Inmaculada Concepción, a las tres de la tarde salió la imagen de Nuestra Señora de la Peña de Francia en peregrinación hasta el Carmen Descalzo (Carmen de Extramuros) con rezo de la Oración de S.S. Pío X para aquel año y canto de la Salve a Nuestra Señora del Carmen. En el regreso se iría cantando la Letanía lauretana, con una plática de despedida y salve a Nuestra Señora de la Peña de Francia.
Asimismo, otro dato que nos informa del calado devocional en Valladolid es que era una de las imágenes visitadas por la Archicofradía de la Corte de María, concretamente el día 11 de cada mes (enlace 1 y enlace 2).
En octubre de 2020, es decir, hace muy pocos días, tuve la oportunidad de hablar con el párroco de San Martín sobre esta imagen e informó que actualmente se hace memoria de Ella, de Nuestra Señora de la Peña de Francia, el día 8 de septiembre, solemnidad de la Natividad de la Santísima Virgen celebrada en Valladolid de manera singular a Nuestra Señora de San Lorenzo, bien es cierto que la coincidencia de ambas advocaciones hace que ésta de San Martín pase más desapercibida, pero aún así se la recuerda en las Eucaristías que se celebran esa jornada. Igualmente informaba de la existencia en el pasado de una Cofradía en su honor hoy inactiva y que salvo el citado 8 de septiembre, no se celebran más cultos en su honor (ya sean novenas, triduos, etc.), habiéndose perdido –por lo que se puede ver- las principales fiestas de Nuestra Señora de la Peña de Francia: el tercer domingo de agosto y el último domingo de octubre (en este caso precedido de su novena).
A día de hoy, la Parroquia, así como las Cofradías allí establecidas, o al menos alguna de ellas (recordemos que en esta Parroquia tienen su sede la Muy Ilustre Cofradía Penitencial de Nuestra Señora de La Piedad y la Cofradía del Discípulo Amado y Jesús de Medinaceli – en cuanto a carácter penitencial- y, la del Sagrado Corazón de carácter devocional), podría fijar su mirada en esta antigua advocación mariana de Nuestra Señora ya sea para recuperar la fiesta e incluso procesión o bien que se convirtiera en Fiesta de Gloria de alguna de ellas…recordemos en este sentido que una candidatura presentada para la presidir una de ellas, concretamente La Piedad, albergaba esa posibilidad. Por otro lado, y aunque el 8 de septiembre es una de las fechas marianas más celebradas, en atención a la historia de la propia imagen y evitar la coincidencia con la celebración de la Patrona de Valladolid, tal vez sería más aconsejable recuperar las antiguas fechas festivas de Nuestra Señora de la Peña de Francia, tanto el tercer domingo de agosto (fecha en que tenía concedido Indulgencia Plenaria) como el último domingo de octubre (especialmente recordado para su procesión) e incluso, en recuerdo de su participación en la Procesión del Corpus Christi, que presidiese alguno de los altares que a lo largo del recorrido de aquella procesión se erigen. Por otro lado, en estas distintas fechas que se mencionan, podría descenderse la imagen de su camarín y dar la posibilidad de poderla contemplar lo más cercana posible. Junto a ello, investigar sobre la propia imagen, el paradero del Niño que tenía, la posible existencia de novenas publicadas u otros ejercicios piadosos, distintivos de la Cofradía (estandarte, varas, medallas/escapularios) y la revitalización de su culto e incluso de su Hermandad.
