Hay fechas que, con el paso del tiempo, se acaban convirtiendo en referencia, efemérides, recogidas y divulgadas por cronistas, historiadores, etc.; tal vez, haya quien las vive en su momento y sea consciente de la trascendencia de lo que vive, ve o en lo que participa y, otros no lo serán y esa transcendencia la otorgará el tiempo. Eso se podría decir de lo que se ha vivido el 13 de mayo de 2022, Festividad de San Pedro Regalado, con la recuperación de la Procesión en su honor el día de su fiesta (fecha que ya se puede unir a aquel 8 de septiembre de 2003 cuando se recuperó la de la Patrona, María Santísima de San Lorenzo). Hablando de cronistas, no puedo por menos que traer a la memoria a un ilustre parroquiano del Santísimo Salvador, principal foco devocional de San Pedro Regalado, cuya obra "Diario de Valladolid" recogió en numerosas ocasiones celebraciones relacionados con el Santo Patrón de Valladolid y que, a buen seguro, ésta habría tenido un lugar en su obra. Sí, me refiero a Ventura Pérez.
Hace dos años, el 13 de mayo de 2020, en plena pandemia, cuando los cultos se debían realizar a puerta cerrada, S.E.R. Ricardo Blázquez, Cardenal Arzobispo de Valladolid, en la Solemne Misa celebrada en honor a San Pedro Regalado con motivo de su fiesta, mencionaba en su homilía que aquel año estaba prevista la celebración de una procesión previa a la Eucaristía, algo que supondría un hito en las Procesiones de Gloria de Valladolid, pues hubiera significado la recuperación de esta procesión del Patrón de Valladolid. En 2020 no pudo ser, y tampoco en 2021, por la misma circunstancia, la pandemia de COVID-19, y hubo que esperar hasta octubre de 2021 para que la imagen del Patrón volviese a recorren las calles de Valladolid, con motivo de la celebración del VIII Encuentro JOHC (enlace). Dos salidas extraordinarias, su traslado a la Catedral (14 de octubre de 2021) y la Procesión de Glorias de clausura de dicho Encuentro (17 de octubre de 2021), en ambos casos, acompañando a la Patrona de Valladolid, María Santísima de San Lorenzo y, en la última, de otras tres imágenes más (Nuestra Señora de Lourdes, Nuestra Señora del Pilar y Nuestra Señora del Carmen de Extramuros). Éstas eran unas salidas de carácter extraordinario, de ahí el título de la entrada, que ésta del 13 de mayo de 2022 supone la recuperación en el día de su fiesta.
Y se dice recuperación porque, efectivamente, la imagen del Santo Patrono de Valladolid y la Archidiócesis, en otros tiempos tuvo procesión en el día de su fiesta; de una manera singular podemos recordar las que tuvo en el siglo XX y que ya se han tratado en otras entradas.
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| "Procesión de San Pedro Regalado en 1928". Fuente: Archivo Municipal de Valladolid. Serie: Jesús Sanz Silla. Identificador: COL_01695. |
Procesión de San Pedro Regalado en 1928 (enlace).
Procesión de San Pedro Regalado en 1929 (enlace).
Procesión de San Pedro Regalado en 1930 (enlace).
Procesión de San Pedro Regalado en 1956 (enlace).
Aquella de 1928 nacía con vocación de perdurar en el tiempo, pero la convulsa situación que vivió el país en los años 30 del pasado siglo XX dio al traste con ello. No obstante dejó recuerdos para la posteridad como la recuperación de la propia procesión y la salida en la misma del grupo escultórico de la “Traslación de San Pedro Regalado” (Pedro de Ávila, c. 1709) que preside el retablo de la capilla dedicada al Santo en la Iglesia Parroquial del Santísimo Salvador. Las de 1928 y 1929, junto a la celebración de Patrón, podríamos decir que se convirtieron en una exaltación de los santos y beatos de la Archidiócesis, participando en la misma la imágenes de los mismos junto con sus reliquias, en algunos casos trasladados desde sus pueblos (recordemos a San Francisco de San Miguel, traído desde La Parrilla y acompañado en la procesión por sus convecinos). Una forma de realizar la procesión, con los santos y beatos de la Archidiócesis que ojala pudiéramos volver a ver en alguna ocasión, yendo hasta templo principal de la Diócesis, ya sea de carácter extraordinario o celebrada cada cierto número de años o, incluso, que se pudiese celebrar con todos ellos (y otros santos/as y beatos/as proclamados desde entonces) en otras localidades, especialmente de las que fueron oriundos. Recordemos que las imágenes que participaron en aquella memorable procesión de 13 de mayo de 1930 fueron:
Imagen del Beato Francisco de Capillas y reliquia del mismo acompañados de PP. Dominicos.
Imagen del Beato José Fernández, acompañada también de PP. Dominicos.
Imagen del Beato Mateo Alonso de Leciniana y su reliquia acompañadas del clero parroquial y una representación de Nava del Rey.
Imagen del Beato Alonso de Orozco y su reliquia acompañadas de Padres Agustinos.
Imagen del Beato Simón de Rojas y su reliquia, acompañadas del clero de la parroquia de San Lorenzo.
Imagen de San Miguel de los Santos y su reliquia, acompañadas de PP. trinitarios y clero de la parroquia de San Nicolás.
Imagen de San Francisco de San Miguel, acompañada del clero parroquial de La Parrilla y un grupo de más de trescientos vecinos de dicho pueblo.
Imagen de San Pedro Regalado con su reliquia acompañada de Padres Franciscanos.
Tras la eliminación de restricciones debidas a la pandemia, las fiestas de San Pedro Regalado del año 2022 suponían una vuelta a su celebración con cierta normalidad. Pero también nos ofrecerían hitos a recordar. Obviamente, el primero de ellos sería la deseada recuperación de la procesión, pero también (66 años después de la última en 1956 y 92 años desde aquella magna con diversos santos y beatos de la Archidiócesis), y dado que la fachada de la Iglesia Parroquial del Santísimo Salvador estaba oculta por andamios a causa de los trabajos de restauración, la procesión salió de uno de los templos cercanos: el Oratorio de San Felipe Neri.
La Novena en honor del Santo se pudo celebrar con normalidad en la Parroquia del Salvador, donde, según la tradición, fue bautizado cuando aún era una ermita dedicada a Santa Elena. En esos nueve días la predicación corrió a cargo de la Comunidad de Frailes Menores de Valladolid (PP. Franciscanos). En el transcurso de la misma, el día 7 de mayo de 2022, tuvo lugar el nombramiento como Cofrades de Honor a la Cofradía de la Orden Franciscana Seglar – La Santa Cruz Desnuda por las diferentes ayudas prestadas a la Hermandad. Ese mismo día se efectuó la imposición de medallas a los nuevos cofrades con un elevado número de altas que señalan el crecimiento de la Cofradía del Patrón. Como viene siendo habitual, en el presbiterio de la Parroquia del Salvador se erigió un altar efímero con la imagen de San Pedro Regalado tallada por Lázaro Gumiel en 1956.
Esta colaboración entre Cofradía del Patrón y la de la Cruz Desnuda se hace patente, por ejemplo, en el préstamo de las andas del Cristo Yacente (de la Cruz Desnuda) para la procesión, como ya ocurriera en octubre de 2021. Por ello el día 4 de mayo se trasladaban desde la Iglesia Conventual de Santa Isabel de Hungría hasta el Oratorio de San Felipe Neri, de donde saldría la procesión. Una estampa extraordinaria tanto la salida de aquel templo como la estancia del “paso” en el mismo durante la novena. Un “paso” que estaba compuesto por las citadas andas cedidas por la Cofradía de la O.F.S. - La Santa Cruz Desnuda (Cofradía que ha colaborado activamente en las primeras salidas de los Patronos de la ciudad, recordemos que en 2003, año de recuperación de la Procesión de Nuestra Señora de San Lorenzo, lo hizo en las andas de la Santa Cruz) y el baldaquino de Nuestra Señora de Valvanera (establecida en la Parroquia del Salvador) realizado por el platero Hipólito Bercial del Valle. La imagen de San Pedro Regalado (taller vallisoletano, primera mitad del siglo XVIII) era la que presidía el Salón de Cabildos de la Casa de Hermandad de la Cofradía de San Pedro Regalado y Nuestra Señora del Refugio. Ambas piezas, imagen y andas, han sido restauradas por Pedro Escudero en 2020-2021. En la víspera de la fiesta, ya se podía ver en el Oratorio el "paso" completo, con su exorno. Ya el día de su fiesta, campeaba ante la imagen del Santo, su reliquia.
El día 13 de mayo de 2022, a las 11:15 h., partía de la Iglesia Parroquial del Santísimo Salvador la procesión siguiendo por Plaza del Salvador, San Felipe –donde en el Oratorio de San Felipe Neri se incorporó el “paso” de San Pedro Regalado-, Teresa Gil, Regalado y Cascajares hasta llegar a la S.I. Catedral Metropolitana, con una emotiva entrada y cuyo pasillo central recorrió el Santo a los sones del Himno Nacional interpretado con el órgano catedralicio.
La planta de la procesión estaba compuesta por:
Acólitos con incensario y naveta.
Cruz de la Parroquia del Santísimo Salvador y ciriales.
Banda de Cornetas y Tambores "Santísimo Cristo del Perdón" de la Cofradía Penitencial de La Sagrada Pasión de Cristo, de Valladolid.
Representaciones de Cofradías y Hermandades Penitenciales de Valladolid.
Representaciones de Cofradías y Hermandades de Gloria de Valladolid.
Representación de la Cofradía de San Francisco de San Miguel, de La Parrilla (Valladolid).
Asociaciones.
Estandarte de la Cofradía de San Pedro Regalado y Nuestra Señora del Refugio.
Excmo. Ayuntamiento de Valladolid bajo mazas.
Cofrades.
Representación de Cofradías Penitenciales establecidas en la Unidad Pastoral Santiago-El Salvador (Penitencial de Nuestro Padre Jesús nazareno y Siete Palabras).
Presidencia de la Cofradía, acompañado por el Hermano Mayor de la Real y Venerable Hermandad de Nuestra Señora del Rosario María Santísima de San Lorenzo (Patrona de Valladolid), Presidente de la Junta de Cofradías de Semana Santa de Valladolid y representación de la Cofradía de la Orden Franciscana Seglar-La Santa Cruz Desnuda.
Acólitos con incensario y naveta.
Paso procesional de San Pedro Regalado, escoltado por Policía Municipal de Valladolid con uniforme de gala.
Presidencia eclesiástica: Rvdo. P. D. José Heras Rodríguez (Párroco de El Salvador-Santiago) y Rvdo. P. D. Javier Fresno.
Banda de la Escuela Municipal de Música Mariano de las Heras, de Valladolid.
Ya en la Catedral se ofició la Santa Misa, presidida por S.E.R. Ricardo Blázquez, Cardenal Arzobispo de Valladolid (quien unos días antes, el 7 de mayo, había sido nombrado Hijo Predilecto de Valladolid), asistido por su Obispo auxiliar, D. Luis Argüello, el párroco de la Unidad Pastoral D. José Heras Rodríguez y otros presbíteros. Ocupó lugar destacado ante el ara la Reliquia del Santo custodiada en la Catedral. En la misma estuvieron presentes la Corporación Municipal y autoridades civiles y militares de la ciudad, representación de Cofradía y numeroso pueblo fiel. Cabe destacar la homilía del Cardenal Arzobispo de Valladolid en la que, además de ensalzar las virtudes del Santo, tornando a un carácter más personal, dedicaba palabras que sonaban a despedida, señalando que seguramente ésta sería la última celebración de San Pedro Regalado que presidiría como arzobispo. No se puede por menos que destacar y agradecer su labor pastoral en Valladolid.
Himno a San Pedro Regalado.
Marchemos ansiosos
los hijos de Ansúrez
con fé denodada
con férvido amor
al pie de la Imagen
del gran Regalado,
el Santo, y el héroe
que es nuestro Patrón.
Viniste esclavo al mundo
y salvo te contempló
en nuestro amado templo
del dulce Salvador.
Ven hoy agradecido
de nuevo a la campaña
y vea en tí la España
un gran libertador.
Oh, tu que en el Empírico
ocupas alto asiento
te dió Valladolid.
Concede hoy a tu España
la palma de la gloria,
da el grito de victoria
y acábese la lid.
Terminada la Misa, se comenzó la procesión de regreso desde la S.I.M. Catedral siguiendo por Arribas, Catedral, Cánovas del Castillo, Fuente Dorada, Vicente Moliner y Plaza del Ochavo (donde se realizó un acto en la casa en la que vivió el Santo) continuando por Lonja, Quiñones, Ferrari, Fuente Dorada, Teresa Gil, San Felipe (quedando el “paso” depositado en el Oratorio de San Felipe Neri) y Plaza El Salvador, hasta la Iglesia Parroquial del mismo nombre donde concluyó la procesión.
La planta de la procesión en este regreso fue similar a la del traslado de ida, pero sin la presencia de la Corporación Municipal ni escolta, incorporándose el Grupo de Coros y Danzas "Zagalejo" y, en la presidencia eclesiástica. D. José Andrés Cabrerizo Manchado, Deán de la S.I. Catedral, y el citado anteriormente Rvdo. P. D. Javier Fresno.
Así pues, Valladolid ha vivido un día histórico volviendo a ver a su Patrón en procesión por las calles de la ciudad en el día de su fiesta, ojala sea por muchos años.
Himno de Laudes en la fiesta de San Pedro Regalado.
San Pedro Regalado, don de Dios,
don a Dios entregado por entero,
no quisiste otros dueños de tu vida,
hecho oración y amor en alma y cuerpo.
Formado por aquel que revivía
de Francisco el espíritu primero,
mantuviste la llama de su antorcha,
defendiste su herencia con denuedo.
Cruzaste los caminos de Castilla
a pie o llevado de ángeles en vuelo,
enseñando, exhortando a seguir fieles
en el vivir sin glosa el Evangelio.
Penitente, abrazado a la pobreza,
predicador ardiente y limosnero,
a los pobres y enfermos repartías
la limosna del pan y del consuelo.
De tu amor, en tus manos y en tu tumba
brotaban como rosas los portentos,
proclamando tu vida plena en Dios;
dado a la tierra estabas, mas no muerto.
Oh Santa Trinidad, a quien dio gloria
Pedro, en la cruz muriendo y renaciendo,
por sus ruegos, levántanos del mal,
llévanos, tras sus pasos, a tu encuentro. Amén.
Himno de vísperas en la fiesta de San Pedro Regalado.
Pedro de La Aguilera y de El Abrojo,
alma profunda, castellano recio,
conquistado en el alba de tu vida
por Jesús y el imán del Poverello.
No mediste renuncias de la carne,
alimentaste el corazón con cielo,
todo era poco por vivir en Cristo,
todo era de tu amor signo y destello.
Enclaustrado, tuviste el corazón
a todo mal y pena siempre abierto;
todo de Dios, de los hermanos todo,
el servicio te fue peso ligero.
Pueblo, nobles y reyes requerían
de tu boca la luz, paz y consejo;
a Cristo en cruz, que pródigo llorabas,
aliviabas en pobres y en enfermos.
Sembrador de Evangelio, orante y pobre,
siervo fiel, perseguido por tu celo,
el camino y la entrega de Francisco
hasta morir seguiste con empeño.
Pedro santo, que en Dios viviste y vives,
llévanos a Dios Trino con tus ruegos,
avívanos la fe, mantennos firmes
en la senda de Cristo y de su reino. Amén.
