La Parroquia de San Isidro Labrador queda erigida por Decreto de 12 de mayo de 1967 y auto de erección 8 de septiembre de 1969, rubricados ambos por D. José García Goldáraz, arzobispo de Valladolid. Como otras muchas, al principio tuvo una sede provisional, siendo otro templo, histórico, dedicado a San Isidro, la Ermita de San Isidro, en aquella ermita tuvo lugar el acto inaugural de la nueva parroquia el 4 de octubre de 1969. La parroquia desmembró su territorio de las parroquias de San Juan Bautista y del Dulce Nombre de María
En esta ermita tuvo, como se ha dicho, su sede parroquial durante unos años, hasta que el 29 de octubre de 1972 Mons. Romero Menjíbar bendice e inaugura el actual templo parroquia ubicado en los bajos de un edificio enclavado en la calle Cigüeña número 8, en el barrio de Pajarillos (Arciprestazgo Este de Valladolid). La memoria del proyecto del templo indica que, como curiosidad, la superficie total del solar era de 992, 11 metros cuadrados, en que el que se enclavaría una parroquia que ocupará una superficie edificada de 416,64 metros cuadrados.
La solicitud para este nuevo templo está encabezada por Mons. Félix Romero, arzobispo de Valladolid, fechada en Valladolid el 7 de enero de 1972 y fue concedida licencia por Comisión Permanente Municipal de 8 de marzo de 1972.
El autor del proyecto es el arquitecto Carlos José Balmori López (1972; la memoria está fechada en diciembre de 1971), dirección técnica de las obras por el aparejador Pedro Julio Baz.
Se trata de una construcción sencilla, de ladrillo caravista, color blanco-paja / acero/ hormigón, techo muy bajo y poca ventilación. Una sola nave general de forma rectangular a la que se adosan otras dependencias como sacristía, aseo almacén-calefacción y confesionarios empotrados. Pequeño pórtico de acceso con doble puerta corta-vientos.
Como se ha dicho anteriormente, la Iglesia se bendice el 29 de octubre de 1972 (en el Diario Regional de ese día, página 5) aparece una foto del presbiterio, con ladrillo visto, el Sagrario (regalado por “Las Marías de los Sagrarios”) y un Cristo crucificado que no se corresponde con el actual. En ese artículo, el párroco señala que es la única imagen existente en ese momento en el templo y que no tienen fondos para adquirir más. Muestra su deseo de tener una imagen de la Virgen (sin especificar advocación ni iconografía), otra de San Isidro y un Via Crucis. En cuanto a la imagen de la Virgen suponía que sería cedida por el Arzobispado, mientras que en el caso de la de San Isidro, habla de conversaciones con la Cámara Sindical Agraria y Hermandad de Labradores para que regalen la imagen del santo.
El primer tramo de la iglesia, más cercano a la entrada, se ha destinado para una capilla más reducida que alberga las celebraciones de la Eucaristía a diario. En el frente de este espacio se encuentra un mural obra de Lorrin Montañés (1984) con una representación –en cuanto a indumentaria- más contemporánea del santo titular de la Parroquia, rodeado de diversos personajes populares de distintas edades, portando elementos y útiles del trabajo de campo, además de una figura, vestida de fraile en actitud orante un tanto enigmática, que oculta su rostro con la capucha del hábito y que de sus manos en oración surgen rayos; además, dos vidrieras, aportan mayor iluminación natural a este espacio, una a cada lado, representando a San Isidro Labrador, con un fondo de paisaje de campos, árboles frutales, trigo, etc., y al otro lado, su esposa, Santa María de la Cabeza.
Unas puertas correderas separan este espacio de la capilla de la iglesia cuando están cerradas o bien aumentan el espacio de ésta última (ejemplo, Misas dominicales o celebraciones con numerosos asistentes) ampliando el espacio de los fieles.
El presbiterio, ligeramente elevado con respecto al resto y rodeado para destacar la idea de asamblea, presenta un gran panel mural en cuyo centro se encuentra el Sagrario, del que emanan rayos dispuestos en círculos concéntricos, a modo de gloria, en la puerta del Sagrario se muestra una representación de la Última Cena (Sagrada Cena) o Institución de la Eucaristía coronado por el anagrama JHS (Jesús Hombre Salvador). Un Crucificado de finales del siglo XVI o principios del XVII es de las piezas más destacadas de la iglesia. A los lados de este mural, dos imágenes contemporáneas, una Virgen con el Niño y San Isidro Labrador, el titular de la parroquia, que podrían adscribirse a la casa Belloso (aunque sería interesante conocer el nombre del escultor que proporcionó los modelos). Ya en el espacio destinado para los fieles, en el muro de la epístola, derecho, una imagen del Sagrado Corazón, en cuya base se lee “Cilleruelo 1959-60”, que puede corresponder al oftalmólogo y escultor de Valladolid José Cilleruelo Zamora (1889-1969).
En la contestación pronunciada por su hermano D. Pablo Cilleruelo Zamora, a su discurso de de recepción pública el día 11 de abril de 1948 en la Real Academia de Bellas Artes de la Purísima Concepción de Valladolid ya se menciona dentro de su obra religiosa las siguientes esculturas: “Nuestra Señor del Carmen, Sagrado Corazón de Jesús, Santa Lucía, San Francisco de Asís y otras”. A tenor de la inscripción existente en la efigie del Sagrado Corazón expuesta al culto en la Parroquia de San Isidro, este Sagrado Corazón que se menciona en la contestación de 1948 tiene que ser una imagen distinta y anterior.
Como curiosidad, D. José Cilleruelo Zamora era también miembro de la Real Academia de Medicina de Valladolid, en la que leyó su discurso de recepción pública el 22 de marzo de 1931.
De las que no dispongo –por el momento- de datos sobre su autoría y datación son las otras, la Virgen con el Niño (desconozco si tiene advocación concreta) y el Santo titular, San Isidro Labrador.
En la historia más reciente de la Parroquia hemos de referir la fecha de 18 de septiembre de 2022, cuando los Misioneros Oblatos de María Inmaculada (quienes el 26 de septiembre de 2015 habían establecido una comunidad en El Abrojo) tomaban posesión, de manos de Mons. Luis Arguello, de la Parroquia de San Isidro Labrador en Valladolid.
