La Pía Unión de San José de la Montaña, devoción introducida en Valladolid a principios del siglo XX, no existe en la actualidad, al igual que tampoco el Monasterio en el que se fundó en esta ciudad, el de Nuestra Señora de la Laura (Dominicas). Antes de tratar de esta Pía Unión y el culto a esta advocación en la ciudad del Pisuerga, es preciso comenzar hablando de la Beata Petra de San José (Ana Josefa Pérez Florido, *Valle de Abdalajís, Málaga, 6 de diciembre de 1845 - † Barcelona, 16 de agosto de 1906, beatificada el 16 de octubre de 1994 en Roma por Juan Pablo II), fundadora de la Congregación de Madres de los Desamparados y San José de la Montaña el 25 de diciembre de 1880. La aprobación diocesana de la Congregación tuvo lugar el 25 de diciembre de 1881. En 1886, la Beata Petra de San José llega a Barcelona para la fundación de una nueva casa de la Congregación. En la misma ciudad, al año siguiente (1887) adquiere la imagen de San José milagrosa (al precio de 200 pesetas) que se instala en la capilla de la Calle San Gervasio de la ciudad condal.
Unos años más tarde, el 19 de marzo de 1895 firma la escritura de donación de un terreno en la “Montaña Pelada” por Carmen Mansferrer, donde se alzará el Real Santuario de San José. La primera piedra se coloca el 14 de agosto. El 19 de marzo de 1902 se inaugura la Iglesia del Santuario y se traslada a San José de la Montaña a su capilla. Por los años 1904-1905 comienzan a verificarse multitud de gracias en este santuario y surge la costumbre de las cartas solicitando favores y acción de gracias que eran quemadas en publico, acto que se prohibió en agosto de 1905, así como otros actos que se celebraban en el Santuario, tales como el Rosario de Antorchas, prohibiciones que se levantan en noviembre del mismo año.
Unos años más tarde, el 19 de marzo de 1895 firma la escritura de donación de un terreno en la “Montaña Pelada” por Carmen Mansferrer, donde se alzará el Real Santuario de San José. La primera piedra se coloca el 14 de agosto. El 19 de marzo de 1902 se inaugura la Iglesia del Santuario y se traslada a San José de la Montaña a su capilla. Por los años 1904-1905 comienzan a verificarse multitud de gracias en este santuario y surge la costumbre de las cartas solicitando favores y acción de gracias que eran quemadas en publico, acto que se prohibió en agosto de 1905, así como otros actos que se celebraban en el Santuario, tales como el Rosario de Antorchas, prohibiciones que se levantan en noviembre del mismo año.
Esta Imagen de San José de la Montaña, venerada en Barcelona fue coronada canónicamente el 17 de abril de 1921.
El modelo de esta efigie milagrosa del Patriarca San José se extiende por las casas fundadas por la Congregación que en la actualidad se halla en nueve países: España, Italia, México, Estados Unidos, Chile, Argentina, Guatemala, Puerto Rico y Colombia.
Un rasgo característico identifica esta imagen, su corona. Parece que la costumbre de representarle con una corona similar a la de Madre de Dios de los Desamparados de Valencia, procede de la imagen que se venera en la Casa Generalicia de esta Congregación en el barrio de Quart, en Valencia.
La fama milagrosa de la Imagen haría que se propagase su culto, se comenzaron a realizar copias de la misma y a fundarse asociaciones en su honor. Así sucedió en Valladolid, ciudad donde se crearon dos secciones, una -denominada la Primitiva Sección- en el Convento de Nuestra Señora de La Laura, y la otra, algo posterior en las Dominicas Francesas.
Pía Unión de San José de la Montaña, Monasterio de Nuestra Señora de La Laura
Casimiro González García Valladolid, en su Compendio histórico-descriptivo y guía general de Valladolid (1922), proporciona los datos de la inauguración de altar e imagen, así como de la fundación de la Pía Unión de su nombre. Así el 11 de marzo de 1907 tiene lugar la “Solemne inauguración del altar e imagen de San José de la Montaña, en la iglesia conventual de las religiosas Dominicas de Nuestra Señora de la Laura” (pág. 244).
Y sólo unos meses más tarde, el 19 de mayo de 1907 “Fúndase la Pía Unión de San José de la Montaña en la iglesia conventual de religiosas de Nuestra Señora de la Laura” (pág. 276).
San José de la Montaña (1907) Pía Unión de San José de la Montaña. Convento de Nuestra Señora de La Laura. Actualmente en el Monasterio del Corpus Christi, clausura. Valladolid. |
A lo largo del año se celebraban diversos cultos en honor de San José de Montaña. Todos los meses, el día 19, se celebraban cultos mensuales. Habitualmente consistían en una misa en el altar del Santo por la mañana. Ya por la tarde se exponía el Santísimo Sacramento, rosario, ejercicio propio del día, bendición con el Santísimo y veneración de la reliquia del Santo. Hay constancia de esta práctica al menos hasta mediados de la década de los 70 del siglo XX
Celebraban también los Siete Domingos de San José, recordando los Dolores y Gozos del Santo como preparación a su Solemnidad del 19 de marzo.
Eran especialmente importantes los cultos celebrados con motivo de la Fiesta de San José, el día 19 de marzo; y por otro lado, la fiesta del Patrocinio de San José, establecida por Pío IX en 1847, en la dominica III después de Pascua. A continuación se muestran algunos ejemplos de estas dos fiestas:
El 19 de marzo de 1916 celebraron solemne fiesta con procesión de antorchas que “dio la vuelta alrededor de la nueva estatua que se ha erigido a San José de la Montaña en el centro del patio”. La imagen, llamada el “Santo Patrón del Obrero” era lleva a hombros por cuatro acólitos que estrenaron en aquella ocasión vestiduras blancas y moradas, obsequio de las señoritas Martínez Carranza, Camareras de la Pía Unión. Se menciona que al finalizar hubo veneración de la reliquia.
Del mismo año, se encuentra el anuncio de la finalización de la Novena y Procesión de Antorchas, que tuvo lugar el 21 de mayo de 1916, procesión en la que “se llevarán siete hermosos faroles con los siete dolores y gozos de San José, regalo de las señoritas Martínez Carranza”. La parte musical de la procesión corrió a cargo de las Banda del Hospicio Provincial.
Esta estatua colocada en el patio parece ser que se bendijo oficialmente un año después, como aparece anunciado en El Norte de Castilla de 16 de marzo de 1917: “La Pía Unión de San José de la Montaña, tributa al glorioso Patriarca los siguientes cultos:
El día 18, por la tarde, después de terminado el ejercicio de los siete domingos, se bendecirá la imagen de piedra mármol que se ha colocado en el patio de la iglesia.
El día 19, fiesta de San José, á las ocho, misa de comunión general, y á las nueve, la cantada, en la que se expondrá á S. D. M., quedando de manifiesto todo el día. Por la tarde, á las cinco y media, estación, rosario, ejercicio del día y sermón por el R. P. Diodoro Vaca, agustino, y reserva. A continuación saldrá la indulgenciada procesión de antorchas”.
San José de la Montaña (1907). Detalle. Pía Unión de San José de la Montaña. Convento de Nuestra Señora de La Laura. Actualmente en el Monasterio del Corpus Christi, clausura. Valladolid. |
La fiesta del Patrocinio de San José variaba en fechas, siendo habitualmente en los meses de abril o mayo. Por ejemplo, en 1918, la fiesta fue el 21 de abril, por la tarde salió la procesión por el exterior del templo con la imagen del santo. Figuraban en la comitiva religiosa unas hermosas farolas representando los dolores y gozos del santo, que eran llevadas por niños vestidos de blanco y morado, entre dos largas filas de los fieles que componen la Asociación.
Durante el acto se interpretaron letrillas y gozos por un terceto de cuerda y algunas voces de la capilla de la Santa Iglesia Metropolitana.
A finales de octubre de 1921, a partir del día 28, esta Pía Unión de San José de la Montaña, junto la del Patrocinio de San José, de las Dominicas francesas, de San Felipe de la Penitencia, de la Corte de San José, de la Magdalena y Asociación de San José, de San Benito el Real, organizaron un Solemne Triduo en la Iglesia Conventual de San Benito El Real, en celebración del L aniversario de la declaración del Patronato de San José en la Iglesia Universal.
Esta Procesión de Antorchas gozaba de ciertas indulgencias. Un recorrido más completo de la Procesión celebrada con motivo de la fiesta del Patrocinio lo conocemos gracias a la crónica de 1922, la procesión tuvo lugar el 14 de mayo, fue por los paseos de Campo Grande y Filipinos, haciendo estación en la Iglesia de las Reparadoras.
No obstante, y como hemos visto anteriormente, también hay referencias a la Procesión de Antorchas en la festividad de San José (19 de marzo), pero parece ser que en esta ocasión no se hacía un recorrido tan amplio, y que se reducía al patio de la iglesia.
En 1925, la procesión recorrió el Paseo de Filipinos, con la imagen del Santo Patriarca y se siguen mencionando los estandartes y faroles representando los dolores y gozos del Santo. Acompañó la Banda de Música “Unión Vallisoletana”.
Estas procesiones llegarían hasta los años 30 del siglo XX. Ya en los 40 hay referencias a los cultos internos, es decir en el templo, los mensuales del día 19, los siete domingos, la fiesta del 19 de marzo y novena preparatoria a la Fiesta del Patrocinio.
Cerrado y derribado el Convento de Nuestra Señora de La Laura, la imagen se trasladó a otro Monasterio de la Orden de Predicadores de la ciudad, al de Santa Catalina de Siena. Actualmente, desde 2009, la imagen de San José de la Montaña se encuentra en la clausura del Monasterio del Corpus Christi de Valladolid.
La imagen muestra al Patriarca con el Niño Jesús en brazos, sobre todo en éste último, en su rostro encontramos semejanzas con obras del escultor Francisco Font i Pons. Como hemos visto anteriormente, se bendijo en 1907, la realización sería por esas mismas fechas.
San José de la Montaña (1907). Detalle. Pía Unión de San José de la Montaña. Convento de Nuestra Señora de La Laura. Actualmente en el Monasterio del Corpus Christi, clausura. Valladolid. |
En la base de la imagen se pueden apreciar unas cartas. En su Santuario de Barcelona, dentro de los Siete Domingos de San José, existe una costumbre ya centenaria, y que se conserva en la actualidad, por la cual, en estas cartas, según se ha hecho mención, se presentan súplicas y acción de gracias que se depositaban en la capillita de San José o se enviaban por correo.
Esta era una de las devociones que contaba con la práctica piadosa de la Visita Domiciliaria.
Esta era una de las devociones que contaba con la práctica piadosa de la Visita Domiciliaria.